Somos unos amantes de la tecnología, pues ésta ha ayudado a que muchas cosas que antes creíamos impensables ahora sean posibles y parte de nuestra vida cotidiana. Sin embargo, sabemos que tiene sus pro y sus contra. Así como todo puede ser usado para el bien, mucho de ello también se usa con algunos fines no muy morales.
CSD > SerDigital > @SerdigitalCL > 19.04.11
Sea en el colegio o en la universidad, las herramientas tecnológicas de las que se disponen para hacer trampa en los exámenes o tareas siempre están a la mano.
Internet se ha convertido en un gran reto para los profesores, quienes deben estar pendientes de si un informe presentado es o no una copia fiel de alguna página de Internet, en lugar de un análisis producto de la aplicación de lo aprendido en clase por parte del alumno.
La creatividad de muchos estudiantes para saber explotar estas herramientas puestas a disposición, abarcan un gran espectro que van desde las más simples, hasta las más elaboradas. ¡Atentos que mañana publicaremos un listado con las 10 más utilizadas!
Estadísticas frente al mal uso de Internet
¿Es posible que Internet y el uso de teléfonos inteligentes anime a los jóvenes a hacer trampas en su trabajo escolar? Sí, afirmó un estudio realizado por el Benenson Strategy Group comisionado por Common Sense Media.
Más de la mitad (52%) de los jóvenes admitió alguna forma de hacer trampas que involucraba a Internet, como por ejemplo, copiando textos de sitios web y entregándolos como trabajos propios. Además, más de la tercera parte de los jóvenes con teléfonos celulares (35%) admitieron haber hecho trampa con ellos por lo menos una vez, incluyendo el enviar textos a los amigos para conseguir las respuestas o buscando en Internet durante los exámenes.
No parecía haber diferencias significativas en la frecuencia de hacer trampas entre estudiantes de las escuelas privadas o las públicas ni entre estudiantes excelentes y los que no lo eran.
¿Qué dicen los padres?
En lo que concierne a los padres, hubo una clara discrepancia entre lo que contemplaban como el comportamiento de otros estudiantes en conjunto y lo que creían que hacían sus propios hijos. Más el 75% de los padres afirmó estar consciente de que el hacer trampas por Internet y los teléfonos celulares se daba en las escuelas a las que iban sus hijos, pero solamente el 7% y el 3% respectivamente creía que su hijo estaba involucrado.
Es evidente que la todo-poderosa Internet y la posesión de aparatos que proporcionan acceso 24 horas, 7 días a la semana han presentado oportunidades para tomar el camino más corto que son demasiado atractivas para que las pueda resistir el joven promedio. Una parte que falta de la encuesta es la actitud de los maestros y las autoridades escolares hacia la existencia de estas trampas de alta tecnología, la cual, seguramente, no habrá de sorprendernos.
Aunque no fuera solamente por eso, el estudio ilustra una vez más la brecha que existe entre la percepción y la realidad en lo que concierne a los padres y cómo ven el uso que sus hijos hacen de la tecnología.
Cuéntanos, ¿Has hecho o crees que tus hijos han hecho trampa en sus estudios utilizando las TICs?
En la era digital… “siente, piensa y actúa digital”
Programa de Alfabetización Digital Mediática 2.0 para la ciudadanía PADM 2.0