¿Cuánto de nuestro trabajo puede ser móvil, a distancia y seguir siendo un aporte a la productividad y al bienestar personal?
Teletrabajo como una forma de diferenciación. En este sentido las empresas deberán ser atractivas para los actuales y nuevos trabajadores; diferenciarse de su competencia en precio y calidad de servicio, no son los únicos desafíos sino ahora deberá asumir el desafío de aprovechar las potencialidades de las nuevas tecnologías.
Cualquier organización puede usar el teletrabajo, si un trabajo requiere más tiempo en la computadora o el teléfono que en las reuniones cara a cara. «Según una encuesta de la revista Fortune de las 100 mejores compañías de EE.UU., 79 permiten a los empleados que teletrabajen al menos el 20% de su tiempo.
El teletrabajo no es trabajo en la casa. Ahora se debe entender como el trabajo móvil, hiperconectado y habitualmente en red. Hoy se transforma en una muy buena alternativa para potenciar la flexibilidad laboral, disminución de costos, aportes en la productividad y cuidado del medio ambiente debido a la reducción de movilización.
Paradójicamente la distancia es su mayor desventaja, ya que los empleados están desconectados de la cultura, rara vez participan en la información de resolución de problemas, y no se desarrollan relaciones interpersonales importantes.
A nivel mundial la experiencia puede viajar digital, ser compartida, etiquetada y clasificada según intereses de los usuarios en red.
@macarenaperez