Pensar en aquellos días de verano, de dura competencia por alcanzar los votos necesarios para vencer, campañas en que según yo, se vio más improvisación y capacidad de amoldarse rápidamente que en otras, incluyendo minorías sexuales, nuevos dispositivos digitales y redes sociales como Twitter y Facebook, me hizo recordar años de franjas electorales en la televisión y pancartas con propaganda dispersas por toda la ciudad y ubicadas, estratégicamente, en los cruces más transitados (dificultando la visión, por supuesto). Y no es que haya desaparecido la actividad propagandística tradicional, sino que resultó sorprendente ver a los políticos adaptándose a las diversas esferas de comunicación social.
Pero, al parecer, hasta ahí llegó la cosa. En este caso, estoy hablando de los presidenciables de esa época (Frei, Enríquez-Ominami y Piñera). De ellos, el único que sigue usando su cuenta Twitter con mucha regularidad resulta ser MEO (su último post de hace 2 minutos). Los otros dos, aunque tienen un equipo que estuvo funcionando en su momento, no se han aparecido en la tuitósfera desde enero (Frei) o marzo (Piñera). No es que los eche de menos, pero quedé con gusto a poco. Pensé que sería la oportunidad de compartir un espacio de mayor cercanía e inmediatez que nunca, entre políticos y ciudadanos, donde las ideas de unos y otros podían ser compartidas en tiempo real. Creo que se han perdido una oportunidad de oro y me alegro de que muchos otros sí la hayan aprovechado. Pero esperaba una iniciativa más contundente de parte los pesos pesados de la política. No sé uds. Quizás estamos mejor así.
Andrea Miranda – @andiboing
Yo creo que los políticos deberían ocupar las redes sociales, bien explicada está en la imagen que adjuntaron, en donde este “político 2.0” sabe bien ocupar las herramientas de comunicación actuales 😀
Pienso que internet, y en especial las plataformas 2.0 pueden promover un acercamientos entre políticos y ciudadanía.
El caso de Barack Obama es un ejemplo, él a través de twitter (además es uno de los más seguidos en twitter, casi 4 millones de seguidores! xD) él dio paso a una nueva era de propaganda/difusión política sin precedentes , acercando a las personas a generar dialogo. Él ocupo todas las redes y permitía a las personas subir videos a youtube, realizar preguntas para luego el contestar la más votada, eso me parece lo más cercano que podemos encontrar de democracia….la opinión de la ciudadanía.
Lamentablemente nos encontramos con un arma de doble filo, porque si bien la web 2.0 puede ayudar a esta suerte de democracia al mismo tiempo puede contribuir a ejercer populismo, aspecto al que hay que cuidarse.
Yo creo mucho en el uso de la web 2.0 para promover la transparencia y la retroalimentación constante.
Las plataformas web 2.0 se posicionan como espacios propicios para ejercer el dialogo, ya que acercan a las personas al quehacer político, además, está claro que las personas deben adecuarse a los cambios sociales actuales y que mejor ejemplo a ello son las transformaciones en las maneras de relacionarse que se han originado a través de internet.
Saludos!